La mítica saga GTI vuelve a Opel y lo hace, contra pronóstico, de la mano del nuevo Opel Insignia. La lógica nos invitaba a pensar en un Opel Corsa GSI, en un Opel Astra GSI… pero no, la firma alemana ha decidido que la insignia de GSI luzca en una berlina deportiva poniendo sobre la mesa a un Opel Insignia GSI de 260 caballos, con tracción total, puesto a punto en Nürburgring y claro, con un aspecto más deportivo. ¿Conseguirá hacerse un hueco en el mercado, donde parece que sólo tienen sentido las berlinas deportivas de marcas premium? ¡Hora de conocer todos los detalles del Opel Insignia GSI.
El diseño más deportivo del Opel Insignia GSI
Respecto al Opel Insignia Grand Sport (recordemos que la nueva generación del Insignia ha recibido esta denominación) nos topamos con un aspecto más deportivo logrado a golpe de nuevos paragolpes, destacando las tomas de aire laterales del paragolpes delantero y las nuevas salidas de escape del paragolpes posterior, sus taloneras, ese nuevo alerón que corona el portón del maletero y que se encarga de darle apoyo aerodinámico al tren posterior y sus nuevas llantas de 20 pulgadas.
El Opel Insignia GSI es 160 kg más ligero que el Opel Insignia OPC V6 2.8.
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En su interior unos bonitos asientos tipo bucket se convierten en el gran reclamo del habitáculo del Opel Insignia GSI dejando claro que lo de este modelo no es sólo pose, sino que tras esta nueva versión se esconde una auténtica berlina deportiva…
El motor de 260 CV del Opel Insignia GSI
El Opel Insignia GSI 2018 recurre a un motor turbo de 4 cilindros y 2 litros de cubicaje. Esta mecánica desarrolla una potencia de 260 caballos y un buen par de 400 Nm. Para su transmisión