Renault presenta pequeñas mejoras en su utilitario eléctrico, el ZOE. Los cambios afectan a su equipamiento y aspecto interior. Además, como principal novedad, cabe destacar la nueva versión de 41 Kw/h, que ofrece una autonomía máxima de 400 kilómetros y que es la protagonista de esta prueba.
El renovado ZOE está disponible en los concesionarios desde 22.125 € con la batería de 22 Kw/h y desde 24.625 € con la batería de 41 Kw/h, siempre y cuando se adquiera el vehículo se adquiera en régimen de alquiler. Si por el contrario se compra la batería, el coste se incrementa en 7.400 € en todas las versiones a igualdad de batería y equipamiento. Aquí puedes consultar todos los precios.
La nueva batería incorpora una energía de 41 kWh útiles, es decir, una capacidad de almacenamiento de prácticamente el doble que la de la batería de 22 kWh útiles. Al igual que esta última, incorpora 192 celdas repartidas en 12 módulos, aunque contiene casi dos veces más energía gracias a dos factores principales: la mejora de la química y la adición de materia activa. Su tamaño no varía, y el peso solo se ha incrementado en 35 kg.
El motor eléctrico R90 suministra, en una fracción de segundo, un par máximo de 225 Nm que permite aceleraciones y reaceleraciones limpias desde los bajos regímenes. La aceleración de 0 a 50 km/h –una franja frecuente en un uso urbano– es de 4 segundos (aquí puedes consultar las especificaciones técnicas de este modelo).
Dinámicamente, el eléctrico de Renault sigue siendo un gran coche, pues el tarado de la suspensión permite que la estabilidad salga ganando sin comprometer el confort. Frente a otros eléctricos, nos ha gustado lo bien que responde el acelerador, tanto en aceleraciones como en retenciones. A diferencia de otros modelos de la competencia, la retención