Hemos dado la vuelta a la esquina detrás de la que se escondía el Tesla Model 3 y como el que no quiere la cosa nos encontramos con los datos finales (y no todos) mientras que las primeras unidades del que será el vehículo eléctrico llamado a sentar las bases de futuro de la automoción son entregadas en pequeños lotes (de momento).
Las 500.000 unidades que Tesla planea poner en circulación en un plazo corto de tiempo van a sacudir con mucha fuerza y hasta los cimientos el mercado de los automóviles. Hasta ahora el panorama de coches eléctricos de gama media vivía una relativa tranquilidad que ahora, de pronto, se ha acabado.
Tesla Model 3: la revolución eléctrica
En el momento de su llegada al mercado lo hará con dos versiones diferentes. La primera es la versión Standard, la versión que previsiblemente será la más popular con un precio de partida de 35.000 dólares, una autonomía de 354 km, aceleración de 5,6 segundos en el 0-100 km/h y velocidad máxima de 210 km/h.
Los datos más prometedores son los ofrecidos por la variante más capaz, la Long Range. A un precio de 44.000 dólares (9.000 más que la Standard), Tesla nos ofrece un eléctrico que se beneficia de su mejor tecnología para alcanzar 499 km de autonomía teórica, 225 km/h de velocidad punta y 5,1 segundos de 0 a 100 km/h.
Por dimensiones y equipamiento, el Tesla Model 3 se mete a luchar en una guerra hasta ahora impropia para los eléctricos (al menos sobre el papel)
Lejos de quedarse en ser un vehículo eléctrico más de dimensiones contenidas, austero y con lo justo para ir dos personas, el Tesla Model 3 se posiciona como una berlina más grande de lo que podríamos esperar, metiéndose de lleno en el segmento C y colocándose a