El sucesor del McLaren F1 está cada vez más cerca. Si en marzo conocimos unas leves pinceladas acerca de su línea de diseño y breves aspectos de su denominación, como que BP23 hace referencia a “Bespoke Project”, proyecto 2 y 3 asientos, ahora conocemos más a fondo el nuevo superdeportivo británico.
Heredando mecánica del actual McLaren 720S, dispondrá de tres asientos distribuidos en una configuración 1+2, como ya hiciera en 1992 uno de los modelos más icónicos para el fabricante, el F1. Esta configuración da importancia al conductor con respecto a los ocupantes, relegándolos a las “plazas traseras”.
McLaren ha utilizado como mula para este nuevo prototipo un 720S modificado. El futuro superdeportivo utilizará parte de la mecánica del 720S, esto significa que contará con un sistema híbrido compuesto por un motor de 4 litros en configuración V8 twin turbo que será capaz de otorgar, junto a los motores eléctricos, más de 1.000 caballos de potencia.
Aunque su diseño actual no se diferencia mucho de un McLaren 720S habitual, las diferencias residen en el interior. Aunque todavía el desarrollo se encuentra en una fase temprana, ya que están utilizando una mula con base de otro modelo, el cambio más significativo es la ubicación del volante, el cual estaría centrado para satisfacer la configuración 1+2.
A parte de este cambio, podemos observar una trasera alargada y un gran difusor en la zaga, así como unas puertas verticales como en el McLaren 720S. El BP23 se convertiría en el modelo más potente de la gama por detrás del McLaren P1.
Aunque el proyecto del McLaren BP23 comenzó como un pedido particular de un cliente de la firma, lo cierto es que los británicos confirmaron que fabricarían 106 unidades. Tengo una mala noticia si os queréis hacer con uno de ellos, ya que todas ellas han sido vendidas.