Seguro que te acuerdas del Lotus Espirit S1 de ‘La espía que me amó’ de James Bond. Aquel coche anfibio era capaz de bucear por el mar como pez en el agua, y ahora Aston Martin quiere hacer algo más a lo bestia para acompañarlo.
El Proyecto Neptuno es el nombre de una colaboración creativa con un aclamado fabricante de sumergibles de última generación para investigadores, exploradores y propietarios de superyates llamada Tritón. El primer sumergible que firma Aston Martin evolucionará en una edición especial que estará disponible en un número limitado (¿te sobran unos millones?), y tendrá una autonomía de hasta 12 horas.
El Aston Martin más lento de la historia
Aston Martin no duda a la hora de salir de su zona de confort, y vende desde ropa y relojes hasta muebles. Y ha querido ir un poco más allá.
Fundada en Florida por L. Bruce Jones y Patrick Lahey, el equipo de Tritón asegura producir los sumergibles de buceo más seguros y de mejor rendimiento en el mundo. Y también los más caros. Su catálogo incluye sumergibles con capacidad hasta para siete personas (el Triton 1000/7) y que alcanzan hasta los 11.000 metros de profundidad (como el Triton 36000/3). Con uno de estos puedes ir a ver el Titanic.
El prototipo que ha diseñado junto a la firma británica cuenta con la base de la plataforma para tres personas, el Triton 1650/3 LP, aclamado por ser el sumergible más compacto y ligero del mundo. Alcanza los 500 metros de profundidad «con total confort».
El juguete está equipado con un paquete de baterías de 30 kWh que proporcionan al todavía prototipo una autonomía de 12 horas. Pesa cuatro toneladas y cuenta con aire acondicionado para mantener a los tres aventureros pasajeros frescos mientras exploran el fondo marino, hasta los 500 metros de profundidad.