La llegada de las primeras unidades del Ford GT a Europa, además de estar despertando mucha expectación, también nos deleita con maravillas audiovisuales como esta.
Los chicos de Ford han encargado al famoso periodista británico Steve Sutcliffe llevarse el Ford GT a alguna de las carreteras más bonitas de Europa. Ha elegido la Carretera del Atlántico en el noroeste de Noruega, y el resultado es sencillamente brutal.
Conducir un superdeportivo de 655 CV en una carretera con límite de velocidad a 60 km/h puede parecer algo ridículo, pero la realidad es que las vistas de esta ruta son tan impresionantes, que cuesta no emocionarse al ver semejante hazaña.
Se trata de una carretera que va literalmente sobre el mar, uniendo las ciudades de Kårvåg y Vevang a través de ocho puentes de dimensiones impresionantes.
El mar como un plato, el entorno en el que se ha construído y la situación donde está, hacen de ella una de esas carreteras que ya está en la lista de las que debemos recorrer al menos una vez en la vida.
Del paraíso a un circuito de record
Tras deleitarnos con una sosegada jornada de conducción en esa carretera, había que sacar el máximo partido al Ford GT. Para ello se fueron a un circuito poco conocido, el Circuito del Círculo Ártico.
Situado a solo 19 millas del Círculo Polar Ártico, este circuito es el que está situado más al norte de Europa, por lo que solo se puede circular en él durante unos meses al año.
Allí el piloto del equipo Ford Chip Ganassi en las 24 Horas de Le Mans Stefan Mücke se pone al volante del nuevo superdeportivo y consigue un record. El anterior récord de la pista estaba en 1:41.0 y tras unas cuantas