Nos guste o no, esta será la radiografía del coche del futuro. Dentro de unos años, tal vez varias décadas, lo normal será que conduzamos coches que no sean de nuestra propiedad. El fenómeno del car-sharing se espera que vaya popularizándose hasta llegar a un punto en que la propiedad del automóvil sea la anécdota, y no la norma. Por otro lado, quizás nos hayamos equivocado al decir que conduciremos coches que no serán de nuestra propiedad. Porque muy probablemente la mayor parte del tiempo que pasemos en un coche no sea conduciendo, sino dejando que él conduzca por nosotros. De ahí que Jaguar haya tenido una visión acerca de ese futuro nada descabellada, la de un volante futurista que no es redondo, y que será la única parte del coche que nos pertenezca. Este volante de Jaguar se llama Sayer, y se presentará estos días en un prototipo denominado FUTURE-TYPE que nos mostrará la visión de Jaguar acerca de la movilidad para el año 2040.
El volante Sayer ha sido diseñado por Jaguar como un prototipo que nos acerca al uso que haremos de un automóvil en el futuro. La idea de Jaguar es que este volante sea propiedad del conductor, y que como otros muchos gadget que utilizamos a diario, desde nuestro teléfono móvil, hasta nuestros tablets, esté siempre con nosotros, en casa, en una mochila, o en el maletín que llevamos a nuestro trabajo.
La idea es que este volante nos dé acceso a la utilización de diferentes automóviles que formarían parte de lo que Jaguar ha denominado como un “club de vehículos bajo demanda”. Un club en el que aún podríamos elegir dos opciones, la de tener nuestro coche, en propiedad o uso exclusivo, o compartir coche, y ser usufructuarios de los automóviles que se presten en este