A pesar de que la situación actual que vive el Grupo FCA (Fiat Chrysler Automóbiles) es compleja, los resultados económicos que han logrado en el tercer trimestre del año son más que buenos. Según las cuentas que han presentado los máximos responsables del grupo italoamericano las ganancias que han obtenido respecto al mismo trimestre del año pasado (2016) ha sido de un 50 por ciento.
Esta parte del ejercicio 2017 se ha visto ensombrecida por la caída de las ventas en México, América del Norte y Canadá. Sin embargo, a nivel global las entregas del consorcio se mantienen estables, pues de enero a septiembre de este año han comercializado 1.123.000 millones de unidades. Además, a pesar de este tras pies, la rentabilidad por unidad entregada ha crecido, pues en el mismo trimestre del año pasado estaba en el 7,6 por ciento, y este año ha subido a un 8 por ciento.
Según los números, los ingresos brutos del Grupo FCA han caído un 2 por ciento respecto al mismo trimestre del año pasado, sin embargo, los ingresos netos (una vez han pagado los impuestos) han crecido un 50 por ciento hasta situarse en los 910 millones de euros. Este crecimiento se está consolidando gracias a la estrategia que están llevando a cabo en el grupo de recortar modelos con bajas ventas o salir de otros mercados en donde su presencia es ínfima y no reporta beneficios.
Para cerrar el año 2017 con los números que habían previsto, seguirán trabajando para incrementar su cuota de mercado entre los clientes particulares y limitar la venta de vehículos industriales. La razón es que el mercado profesional demanda cada vez mayores descuentos y esta rebaja en precio final repercute directamente sobre el rendimiento unitario. Además, esperan mejorar sus ventas en los mercados emergentes, pues actualmente están renovando