A comienzos del próximo año saldrá a subasta este Porsche 550A Spyder del año 1958, una de las solo 40 unidades fabricadas de este modelo. Se trata de una unidad que además cuenta con un buen bagaje en competición y eso, frente a lo que ocurriría con cualquier otro vehículo subastado, hace que su valor sea mayor.
Este precioso Porsche 550A Spyder compitió en las 24 Horas de Le Mans donde quedó segundo en su clase y quinto en la clasificación general. También se atrevió con los 1.000 kilómetros de Nürburgring donde acabó en el podium. Prepara mucho dinero si quieres hacerte con el.
Porque el coche será subastado el día 18 de enero en Scottsdale (Arizona) de la mano del especialista de subastas Bonhams. Saben que este puede ser uno de los Porsche más caros del momento, ya que se encuentra en perfectas condiciones a pesar de su largo historial en competición.
Además de las míticas pruebas francesas y alemanas, este 550A también compitió en las 12 Horas de Reims, ganó en su clase en la Zandvoort NAV y se da la circunstancia de que es el único 550A que compitió en un Gran Premio, el de Holanda donde consiguió la victoria en su clase.
El 550A fue el sucesor natural del mítico 550 Spyder, y contaba con una serie de mejoras que lo hacían más competitivo frente a sus rivales de Ferrari y Aston Martin.
El «matagigantes»
Hablamos de un motor 1.5 litros de cuatro cilindros, mejoras en las suspensiones, un chasis más rígido que mejoraba significativamente la dinámica y una reducción de peso bastante considerable para un modelo tan simple y sencillo.
Eso le llevó a adquirir el mote de «matagigantes» el el mundo de la competición de finales de los años 50 y comienzos de la década