El Grupo Volkswagen está pisando el acelerador en cuanto a movilidad eléctrica y autónoma. El conglomerado empresarial más potente de Alemania quiere ser líder indiscutible en este segmento de mercado cuando el año 2030 toque a su fin. Sin embargo, alcanzar dicho objetivo no es baladí y por ello saben que han de gastar dinero a diestro y siniestro para desarrollar la tecnología que deberán tener sus coches.
Tan importante es para Volkswagen este objetivo, que el propio Matthias Müller ha llegado a afirmar que serán ellos quienes reinventen el automóvil. Estas palabras surgen de la cantidad de dinero que se han comprometido a invertir en innovaciones y tecnologías a futuro. Según el conglomerado alemán, entre los años 2018 a 2022 invertirán un total de 34 mil millones de euros en I+D+i.
Las principales áreas a las que irá a parar este dinero tienen que ver con el desarrollo de motorizaciones híbridas y eléctricas. Con esta medida, el Grupo Volkswagen quiere reducir su huella en el medio ambiente con sus nuevos modelos, pues en el año 2030 todos serán eléctricos (es decir, que todos sus modelos contarán al menos con una variante movida por electricidad).
Otro apartado que se llevará buena parte de este multimillonario presupuesto tiene que ver con el desarrollo e implantación de la plataforma para vehículos eléctricos MEB. Esta base llegará a los modelos de las diferentes marcas que conforman el grupo. Para ello seguirán la misma estrategia que con la última plataforma que han lanzado, la MQB. Además, mientras la plataforma MEB se expande por las plantas del grupo, todos los modelos eléctricos que se levanten sobre ella, saldrán de la planta alemana de Zwickau donde se ensamblan los Golf, Passat o Bentley Bentayga y Continental.
Por ahora, y si los planes se mantienen tal y como ha comunicado el