Hace diez años nos las prometíamos felices. Durante cuatro años seguidos en España se habían vendido más de millón y medio de coches al año, cifras que, huelga decir, no han vuelto a alcanzarse a lo largo de la última década. Al cerrar 2007 se constataba la estabilidad de un mercado que se había acomodado en el entorno de los 1,6 millones de coches nuevos matriculados cada año. El paro en España alcanzaba mínimos históricos, pensábamos como nunca antes en comprar pisos, y no nos preocupaba hipotecarnos, ya no solo para adquirir una primera vivienda familiar, sino para invertir en segundas viviendas, o guardar un coche más grande y caro en el garaje. Quién iba a pensar que todo eso se iría pronto al garete. Diez años después es un buen momento para analizar cómo era aquel mercado, y cuáles fueron los diez coches más vendidos en España hace diez años.
El coche de moda no era el SUV, sino el monovolumen
La fiebre por los SUV apenas había despertado. El Nissan Qashqai prácticamente acababa de llegar a los concesionarios, y ya apuntaba maneras. Y el fenómeno por aquel entonces se llamaba monovolumen. Las carreteras españolas y las calles de sus ciudades habían sido conquistadas por coches de dimensiones compactas, proporciones afurgonetadas y cierta altura. Productos muy orientados a familias con niños pequeños, que no tardaron en conquistar también a otro tipo de clientes, desde aquellos que ya tenían a sus hijos bien creciditos, hasta los que simplemente necesitaban espacio y un maletero cómodo y accesible.
En España se vendían cada año más de 250.000 monovolúmenes. Y como podrás imaginarte, la gran mayoría eran diésel.
El coche de moda, el que más había crecido durante años, era sin duda el monovolumen, por supuesto diésel
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