El mundo del motor está lleno de retos que muchas marcas tratan de superar para hacerse un hueco en la historia. De entre todos ellos, uno que no se suele oír con demasiada frecuencia es el del récord de altitud en coche. Una hazaña que implica una dificultad técnica y un esfuerzo para sus equipos que supera con creces a otras más llamativas como los récords de aceleración o de velocidad.
La Scuderia Cameron Glickenhaus, una marca dedicada a construir superdeportivos como el SCG003S ha dado el salto a los todoterreno con la reaparición del Baja Boot. Un curioso vehículo a caballo entre un buggy y un todoterreno militar del que solo fabricará 25 unidades para todo el mundo. Éstos serán los vehículos elegidos para intentar batir el récord de altitud en coche y dos de esas unidades serán modificadas para escalar un volcán de 7.000 metros en América del Sur.
Las condiciones extremas de un récord de altitud en coche
Antes de pasar por taller y recibir las modificaciones necesarias para batir este récord, los Baja Boot ya cuentan con cualidades offroad sobresalientes gracias a su tracción 4×4, una suspensión con un recorrido de 50 cm y un motor V8 atmosférico. Sin embargo, esta última característica es el talón de Aquiles de estas unidades en su versión de serie para moverse a grandes altitudes. Al disponer de cada vez menos oxígeno a medida que se asciende, los motores que obtienen el aire para la combustión de forma natural (sin ningún sistema para forzar su entrada), pierden potencia drásticamente. En especial al llegar a las alturas necesarias para batir este récord.
Por este motivo, los Baja Boot que tratarán de alcanzar los 7.000 metros tendrán un motor turbo, capaz de forzar la entrada de aire en el motor para poder mantener la potencia en