La independencia de Cupra era un secreto a voces desde hace meses, una estrategia que deja huérfana a SEAT, pero que promete ser un importante paso adelante tanto para SEAT como para Cupra al diferenciar ambas marcas con todo lo que ello implica. Que Cupra sea un ente realmente independiente de SEAT no será un proceso fácil, ahí está el caso de Fiat y Abarth, sin embargo Cupra, la nueva marca de coches deportivos española, parece tener un futuro prometedor que hoy analizamos en detalle.
Más allá del cambio de logos, Cupra está obligada a demostrar la diferenciación de SEAT, algo que no será nada sencillo
Independizar un sello como Cupra no será fácil, nada fácil, pero si una marca puede hacerlo es SEAT con el amparo del Grupo Volkswagen y la experiencia de SEAT Sport. Dicho esto, la clave está en cuál será la estrategia de Cupra a partir de ahora y si realmente veremos un traslado de la independencia entre marcas a modelos tan diferenciados como para llevar distintas firmas. Y justo es ahí donde entra en escena Abarth y los parecidos razonables que se nos vienen a la cabeza.
El futuro de los coches deportivos de SEAT
Abarth está viviendo en estos momentos el que podríamos llamar como sueño cumplido de ser un fabricante independiente, otra vez claro. Esto es una realidad, con sus matices si lo analizamos desde el punto de vista más estricto y su pertenencia a FCA, pero con un portfolio de modelos que delatan que un Fiat 500 poco tiene que ver con un Abarth 595 y que un Fiat 124 Spider cuenta con un comportamiento que queda lejos del Abarth 124 Spider. De este modo, la independencia de Abarth se ha materializado en dos modelos, no estrictamente propios como nos gustaría, pero sí con la suficiente