El 500L llegó al mercado en el año 2012 para sustituir a los denostados Multipla e Idea sin imaginar que se convertiría en un auténtico éxito de ventas para Fiat. La casa italiana, que ya había rescatado del olvido al 500 original en el año 2007, quería con el 500L reeditar el éxito que supuso en los años 50, del pasado siglo, el 600 Multipla, pues logró mantenerse en producción desde el año 1955 hasta el año 1982.
En los casi seis años que lleva a la venta, el Fiat 500L ha logrado convertirse en el modelo preferido por las familias europeas durante cinco años consecutivos. Su cuota de mercado en el Viejo Continente, durante el pasado año, fue aproximadamente de un 22 por ciento, incrementándose hasta el 52 por ciento en su país natal, Italia. Además, en lo que llevamos de año, 2018, sus ventas en el continente se han incrementado un 5 por ciento respecto al mismo mes del pasado año.
Gracias a todo ello y al ligero restyling que sufrió el pasado año para actualizar su imagen, gama mecánica y equipamientos, Fiat ha producido en estos días la unidad medio millón del 500L. En este caso, el vehículo que celebra tal hito es una unidad con terminación Cross, mecánica diésel 1.6 MultiJet de 120 CV y carrocería bicolor Naranja Sicilia con techo negro brillante.
Para celebrar este dato, el centro productivo que Fiat tiene en la ciudad de Kragujevac, en Serbia, ha celebrado una fiesta por todo lo alto. Esta fábrica es una de las más avanzadas del Grupo Fiat Chrysler Automobiles (FCA) en todo el mundo, pues para iniciar la producción del 500L, recibió una inversión de mil millones de euros para actualizarla por completo. En estas obras se incluyó toda su infraestructura exterior, reforma de edificios y departamentos de