Billy Monger es ya todo un ejemplo de superación. Su historia conmovió a toda la familia del motor, desde pilotos hasta los aficionados, que no dudaron en recaudar una importante suma de dinero para ayudarle en su rehabilitación. Y por lo que parece, le ayudó y mucho.
Desde que se despertó del coma, el piloto británico aseguró que pronto se volvería a subir a un coche, que el accidente sufrido no iba a ser impedimento para él, y así fue. No tardamos en volverle a ver subido en un coche adaptado para él y este fin de semana ha vuelto a la Fórmula 3 británica, para seguir con su carrera deportiva.
Hace menos algo menos de un año que Billy Monger perdió sus dos piernas en un accidente en una carera de la Fórmula 4 británica en Donington Park. El piloto que entonces tenía 17 años, chocó frontalmente contra un monoplaza parado en la pista.
La gravedad del accidente fue evidente desde el primer momento en el que ambos monoplazas quedaron destrozados. Las asistencias tardaron casi dos horas en excarcelar a Monger del amasijo de fibra de carbono e hierros en los que se había convertido su coche. Cuando consiguieron sacarlo, fue evacuado en helicóptero al hospital Queen’s Medical Centre. Las malas noticias no tardaron en llegar. Los médicos consiguieron salvar su vida, pero no sus extremidades inferiores.
Monoplaza adaptado a sus necesidades
Aunque tan solo ha sido una prueba piloto, Monger ha vuelto a subirse a un monoplaza de carreras en una prueba oficial. Ha sido en la Fórmula 3 británica y con un coche adaptado a sus necesidades.
Con el acelerador en el volante y el freno accionado con la prótesis de su pierna, ha podido volver a ser uno más de la parrilla y volver a luchar por su