En los últimos días hemos asistido a la presentación del que, sin duda, es el buque insignia de Volkswagen, el más lujoso, el más tecnológico, y el más caro. Sin lugar a dudas hablamos del Volkswagen Touareg, un producto que, por su trayectoria, ya asumíamos estaría demasiado cerca de Audi y que, con lo visto en los últimos días, no hace otra cosa que confirmar nuestras sospechas, a la espera incluso de conocer su precio, que mucho nos sorprendería se alejara de las cifras en las que se mueve el Audi Q7. ¿Necesitan los clientes de Volkswagen un coche como el Touareg? ¿Por qué se ha buscado este enfoque para el nuevo Volkswagen Touareg? ¿Estamos ante el mayor error de Volkswagen?
El gran “error” de Volkswagen
Si pensamos en aquellos momentos en los que Volkswagen ha querido ser Audi, nos vendrán a la mente ejemplos como el del Volkswagen Phaeton, y algunos de los errores más graves cometidos por una marca la cual no suele dar un paso en falso, que probablemente culminarían en un cambio de ciclo, acelerado por el desastre de las emisiones y los diésel que ya todos conocemos.
Los tiempos han cambiado. Pero nos cuesta imaginar que este Volkswagen Touareg baje de los 60.000 euros – en esos precios ya se situaba antes de su relevo generacional. Un Touareg que de nuevo estaría muy cerca de los precios de un Audi Q7 y a un mundo de los de un Volkswagen Tiguan – por el precio del Touareg podrías comprarte dos Tiguan – o incluso de un Tiguan Allspace, que ya dispone de siete plazas. Tendremos que ver en directo a este nuevo Touareg, y probarlo, para de verdad constatar si está a la altura del Audi Q7. Pero, al menos tecnológicamente, no parece que vaya a estar lejos