La media de emisiones de CO₂ correspondiente a los coches nuevos comercializados en 2017 han subido por primera vez en los últimos diez años. Dicho de otra manera: los automóviles nuevos vendidos durante todo el año pasado fueron más contaminantes que en 2016, concretamente 1 g/km más de media.
Durante una década esta tendencia ha estado a la baja, pero el último informe publicado por la patronal de concesionarios españoles Facounauto, en base a los datos de la consultora MSI, pone de manifiesto este repunte en el CO₂. La desproporcionada persecución del diésel y la moda SUV son señaladas por Faconauto como las principales causas.
Fuente: Faconauto.
116 g/km de CO₂: ésta es la media que han registrado las emisiones de los coches nuevos vendidos durante todo 2017. No es para alarmarse si miramos una década atrás, con 2007 como referencia. Aquel año las emisiones medias de los automóviles comercializados se fijaron en 158 g/km de CO₂. 2007 fue el primero que estrenó una tendencia a la baja que se ha mantenido hasta 2016, año en el que se registraron 115 g/km de CO₂.
Si bien es cierto que los números nos confirman que los coches de hoy son menos contaminantes que los de ayer, las exigencias medioambientales han marcado el camino, quizá en los últimos tiempos se ha perdido un poco el norte. Ahora que diésel es el enemigo público número uno de la atmósfera, la gasolina vuelve a estar de moda. Y claro, se nos había olvidado que también contamina…
La obsesión por el NOx nos ha hecho olvidar el CO₂
Siendo muy genéricos, el problema con las emisiones de los motores de combustión se divide en dos en cuanto a compuestos químicos se refiere: dióxido de carbono (CO₂) en el caso de la gasolina y óxidos de nitrógeno