La venta de vehículos eléctricos en China se está convirtiendo en un asunto, casi, de estado para la gran mayoría de firmas que comercializan sus productos en este país. Esta situación, la supo ver hace ya unos cuantos años el grupo Daimler AG, pues mandó a su firma premium Mercedes-Benz a hacer negocios con BYD Auto, uno de los fabricantes locales mejor posicionados en este terreno.
Fruto de esta colaboración nació la firma Denza, y su primer modelo fue el monovolumen eléctrico 500. Este vehículo, era, en el año 2014 un hermano “mellizo” del Mercedes-Benz Clase B Eléctrico que por aquél entonces comercializaba la firma de la estrella en Europa y Estados Unidos. Aquél modelo dejó de comercializarse cuando arribó al mercado su segunda generación, aunque la versión de Denza aún se mantiene en el catálogo de la firma.
Es evidente que el tiempo ha pasado para el Denza 500 (está basado en la plataforma del Mercedes-Benz Clase B de 2005), pues si cuando llegó a China ya era un modelo con unos cuantos años a sus espaldas, ahora que lleva otros tantos, su situación frente a sus rivales más modernos ha empeorado. Por esta razón, los responsables de BYD han impulsado un nuevo restyling que los diseñadores de Denza han llevado de la mejor forma posible.
El lugar donde se concentran la mayoría de los cambios es en su frontal y trasera. En la zona anterior cambian la parrilla, los grupos ópticos con luz de día por LED integrada y un paragolpes con nuevas formas. En la zaga, sólo han cambiado las formas del paragolpes, añadiendo para realzar su figura unas molduras cromadas en la zona baja y media del paragolpes y portón respectivamente.
En el interior, las líneas básicas de diseño se mantienen, aunque se ha mejorado el sistema de infoentretenimiento, pues