Concesionarios convertidos en máquinas expendedoras. El concepto no es nuevo y cada vez encontramos más ejemplos. El último viene de la mano del gigante chino de comercio eléctrónico Alibaba que, a través de su plataforma Tmall, acaba de poner en marcha en Cantón (China) una máquina expendedora bautizada como ‘Supercentro de pruebas de conducción’ y que por el momento se limita a comercializar modelos de Ford.
Aunque la apertura de su primer centro expendedor de coches estaba programado para principios de 2018, ha sido ahora cuando Alibaba ha estrenado su concesionario sin vendedores. También ha cambiado el lugar, escogiendo finalmente Cantón y no Nanjing.
La llegada de este curioso sistema que te vende coches como si fueran refrescos ha venido de la mano con el comercio electrónico, por lo que no es de extrañar que un consorcio como Alibaba se haya sumado con su ‘Supercento de pruebas de conducción’. ¿Más ejemplos? Pues el de Caravana en Nashville o el de Autobahn Motors, que comercializa coches de lujo en un impresionante edificio de cinco plantas y con hasta 60 modelos expuestos.
En el caso de Alibaba, su centro de venta a modo de autoservicio se materializa en un edificio que puede albergar hasta 42 vehículos y que va equipado con un sistema de elevación inteligente, así como con un dispositivo de indentificación. Todos están expuestos y pueden verse a pie de acera como ocurre con los anteriores ejemplos mencionados.
¿Cómo funciona la máquina de vending de Alibaba?
El concesionario a modo de máquina expendedora de Alibaba opera a través de una aplicación de smartphone. Los clientes escogen qué modelo les interesa de los disponibles y la app les envía toda la información del mismo. El siguiente paso es probarlo, de ahí el nombre. Una vez elegido,