Como en muchos otros sectores, que una marca cuente con un buen servicio post-venta es algo que los usuarios de dicha firma agradecen. La compra de un automóvil es algo especial, ya no solo por la libertad que nos brinda a la hora de desplazarnos, sino por el valor económico del mismo. Mazda se ha servido de su filosofía para ofrecer a sus clientes un trato personalizado, tanto a la hora de vender sus modelos, como en su servicio post-venta.
La firma nipona, declarada mejor marca de automóviles de 2017 en los Estados Unidos, tuvo un volumen de ventas en 2017 de 18.600 unidades en nuestro país, y estima las de este año en unas 21.000. El claro aumento de las ventas, que allá por 2012 eran de tan sólo 4.600 unidades, se debe en parte a una renovada estrategia por parte de Mazda, que se enfoca en la personalización en toda la experiencia del cliente, desde que se interesa por la compra de un modelo, hasta el servicio de revisiones del mismo.
Para ello, la marca japonesa nos citó en sus oficinas para explicarnos en que se basaba su estrategia, y más importante, enseñárnosla de primera mano. Lo más importante para ellos es el grado de recomendación que tienen sus clientes, y eso se obtiene ofreciendo un buen servicio, hecho que se consigue ganándose la confianza del cliente mediante un buen trato que además, en su caso, está personalizado. El evento, eso sí, estuvo aderezado con una ruta con el deportivo roadster por excelencia, el Mazda MX-5.
Orgullosos, los chicos de Mazda nos contaron que el grado de recomendación de sus clientes es de un 74%, cifra que se encuentra entre marcas premium como BMW o Audi. También pudimos presenciar en directo una simulación de como sería una revisión en un taller