El New York International Auto Show abrió sus puertas el pasado día 30 de marzo y entre las principales novedades que en él se presentarán está el ligerísimo restyling que Mazda ha aplicado al pequeño todo camino CX-3. Según los responsables de diseño de la firma nipona, el nuevo CX-3 cuenta con un diseño Kodo más evolucionado, una gama mecánica SkyActiv más avanzada y un equipamiento de seguridad más amplio gracias a la llegada del paquete iActivsense.
Si entramos en el primer tema que según Mazda ha mejorado, el diseño del CX-3, lo que más llama la atención, es que nada llama la atención. Lo único que parece haber cambiado tras el restyling es la parrilla delantera, unas nuevas llantas de aleación de 18 pulgadas de tamaño y el tono para la carrocería llamado Soul Red Crystal. De puertas adentro se han incluido un freno de mano eléctrico y un reposabrazos central para la fila trasera.
A nivel mecánico, el bloque SkyActiv-D recibe varias mejoras con las que supera la normativa de contaminación Euro 6d-Temp, incluidas las pruebas de emisiones en condiciones de uso real (RDE). Entre las medidas tomadas, se ha incrementado ligeramente la cilindrada del motor para mejorar la temperatura de combustión, a fin de reducir las emisiones brutas de NOx. Por último, se incluye un catalizador de almacenamiento NOx que reduce el contenido residual de óxidos de nitrógeno del escape hasta los niveles exigidos por la normativa.
Las mecánicas SkyActiv-G también han sido objeto de gran revisión, pues para reducir sus emisiones de partículas, como se ha llevado a cabo con los bloques diésel, se ha incluido un filtro de partículas. Gracias a él, también cumplen la exigente normativa Euro 6d-Temp, pues también incluye una prueba de emisiones en condiciones reales de circulación.
Por último, llega el paquete i-Activesense que incluye un nuevo