Una de las novedad más importantes de BMW en esta primera mitad de año es el BMW iX3. El coche de por sí ya es una novedad importante. Basado en el nuevo BMW X3, promete una autonomía muy superior a la del BMW i3, el único modelo 100 % eléctrico del fabricante alemán en la actualidad. El coche se desvelará, como concept car, en el próximo Salón de Pekín.
Su presentación en China no es casual. El futuro BMW iX3 se fabricará en China. Allí, el despliegue de medios de BMW será impresionante. Sin embargo, en Occidente, BMW ha decidido reducir su presencia. Tras no exponer en el pasado Salón de Detroit, BMW reducirá drásticamente el tamaño de su stand en el próximo Salón de Fráncfort. Es un aviso a navegantes en toda regla.
Stand de BMW en el Salón de Fráncfort 2013.
El Salón de Fráncfort ha sido tradicionalmente el Salón donde las marcas alemanas más han invertido en stand. Más que stand, son pabellones de varios pisos a la gloria de la marca. Sin embargo, para la edición de 2019, BMW ha reservado tan sólo 3.000 metros cuadrados. Sí, tan sólo 3.000 metros cuadrados. Y es que en la anterior edición, en 2017, el stand tenía una superficie de 11.000 metros cuadrados.
De hecho, en los últimos años, el grupo BMW (BMW, MINI y Rolls-Royce) ocupaba todo el pabellón 11 de la feria. Es un evento de poco más de una semana que le costó en 2017 al grupo unos 25 millones de euros. Pieter Nota, el nuevo director de ventas de BMW, es el impulsor de esta nueva tendencia en la marca.
De momento, la marca no planea retirarse del Salón de Fráncfort, aunque MINI lleva ya un par de años sin acudir al Salón de