La electrificación del sector del automóvil, aunque pasito a pasito, ya está en marcha, y son muchos los proveedores de componentes los que han de ir adaptándose a los nuevos tiempos y a las exigencias de estos vehículos de nueva generación, tanto eléctricos puros como híbridos.
El que sea probablemente uno de los fabricantes de equipos de frenos más conocidos del mundo ya se está preparando para satisfacer la futura demanda que generarán estos nuevos tipos de vehículos. Hablamos de Brembo y de los frenos electrónicos o «brake-by-wire».
Mientras que los automóviles convencionales con motor de combustión han recurrido históricamente a frenos hidráulicos, los más recientes híbridos, híbridos enchufables y eléctricos recurren casi en su totalidad a sistemas de freno electrónicos. Y, según Brembo, en un futuro el sector del automóvil en su totalidad dará este paso, como en su día se pasó de los tambores a los discos de freno.
Serán tendencia en la próxima década
«Los sistemas de freno electrificados serán una fuerte tendencia en la próxima década. Los equipos brake-by-wire nos dan a nosotros y a los fabricantes una gran flexibilidad de puesta a punto», afirmaba recientemente el director ejecutivo de Brembo, Giovanni Canavotto, a la revista estadounidense Car and Driver. Y es que este tipo de sistemas permiten ajustar el tacto o la respuesta de los frenos al gusto.
Los frenos electrónicos o «por cable» se llevan usando muchos años en competiciones como la Fórmula 1 y permitirían en un futuro que los coches de calle pudieran contar con diversos ajustes para la dureza o el recorrido del pedal de freno, de igual forma que los modos de conducción varían parámetros de la dirección o la suspensión.
«Tendremos que trabajar en los algoritmos, ya que los sistemas eléctricos tienden a funcionar como un botón (encendido/apagado). Habrá que concentrarse en el tacto y