Por todos es sabido que California es el estado más avanzado de los 50 que componen Estados Unidos, y es por ello que cuenten con una tecnología que en los demás países del mundo tardemos en ver por nuestras calles. Primero fueron los vehículos eléctricos y, ahora, las matrículas digitales, un producto que podría revolucionar el mercado del automóvil.
A pesar de que todavía esta tecnología está en fase de pruebas, solo un 0,5% de los vehículos de California, lo que serían unos 175.000 coches, pueden optar a testar estas nuevas matrículas. Las placas, que tienen un precio de 700 dólares, se pueden adquirir en concesionarios, y además de mostrar mensajes personalizados, puede ofrecer información del tráfico a los demás conductores.
Para ello, las nuevas placas disponen de un sistema rastreador que permitirá al dispositivo registrar los datos del viaje y el tráfico, para mostrar dicha información al usuario. Este funcionamiento evitará también el robo del vehículo, ya que el conductor contará con la ubicación de su coche en todo momento.
Este servicio tendrá un coste mensual de 7 dólares, pero no será el único pago que el usuario tendrá que realizar, ya que, en el momento de adquirir la nueva matrícula, tendrá que abonar 80 dólares para dar de alta su vehículo. Además, es muy probable que se añadan tarifas a la hora de instalar el dispositivo. No todo iba a ser tan bonito.
El funcionamiento de estas matrículas es sencillo. Cuando el vehículo esté en movimiento se mostrará como una placa normal y corriente, enseñando el número de identificación del coche del usuario, mientras que cuando el vehículo esté estacionado, mostrará información del tráfico o datos del viaje relevantes.
A pesar de que muchos de los prototipos enseñados en los salones del automóvil a lo largo del mundo portan pantallas que permiten a