Todo estaba listo para otra de las grandes fiestas de los rallyes en España. El Islas Canarias no sólo recibía a los pilotos del Nacional de Asfalto, sino que también es la segunda cita del Campeonato de Europa después del habitual inicio marcado por la dureza del Rally de Azores. Lo hacía además con el atractivo de saber si los pilotos españoles conseguirían estar en los tiempos de hombres como Alexey Lukyanuk o Nikolay Gryazin, siendo este último una de las grandes novedades después de causar baja en la cita lusa.
Después de abandonar en el Sierra Morena por un problema mecánico, era Cohete Suárez y su nuevo Hyundai i20 R5 el mejor representante de los competidores nacionales. El asturiano trataría de plantar cara a los dos primeros espadas dentro del campeonato continental, sin embargo, el ritmo de ambos sería prácticamente imposible de seguir para el de Pravia, que debía conformarse con cerrar las posiciones del podio al final del primer bucle y además ser el mejor clasificado entre los pilotos del Campeonato de España.
El Campeón del CERT 2017 tampoco lo pondría fácil. Su decisión con la monta de neumáticos en el tramo de Valsequillo con el que se daba inicio a la carrera sería crucial para comenzar en el ritmo de los participantes del ERC, con un estelar Alexey Lukyanuk que se ponía al frente de la prueba sumando dos de los tres primeros scratchs (Miguel Fuster sería el autor del tercero) en una carrera en la que ya sabe lo que es ganar. Otros como Iván Ares reconocían haber fallado al confiar en el compuesto de agua para una especial que con el paso de los primeros coches terminaría mostrando en su mayoría un agarre de seco.
Para entonces la carrera ya se había cobrado sus primeras víctimas, especialmente destacada