Que Volkswagen sea ya la séptima marca en no acudir al Salón del Auto de París 2018, ya no es una sorpresa. Probablemente no será la última. Y no es algo específico a París. Mercedes-Benz, por ejemplo, no acudirá al próximo Salón de Detroit. Ya lo sabíamos, los grandes salones del automóvil, tal y como los conocemos, están destinados a desaparecer. Sin embargo, los salones tradicionales, pero de tamaño regional, están en pleno auge.
Muchos son los fabricantes que han cancelando sus presencias en los grandes salones internacionales. Algunos llevan ya años pasando de acudir a ciertos salones, como Volvo que solo acude a tres salones al año (Detroit, Ginebra y Pekín) o MINI que lleva varias temporadas prescindiendo del Salón de Ginebra.
Recientemente, es Volkswagen (la marca, que no el grupo entero) quien ha decidido no acudir al Salón de París de 2018. Y no es la única marca que pasa del Salón de París. Ford, Opel, Mazda, Nissan, Infiniti y Volvo ya no estuvieron en la edición anterior del Salón de París. Mercedes-Benz, que sí acudirá al evento parisino, no estará presente en el próximo Salón de Detroit.
Es el principio del fin para el Salón del automóvil internacional y mediático
Esta tendencia, en la que los salones tradicionales van a desaparecer, se ve confirmada por estos dos últimos anuncios. Sin embargo, puede que finalmente los salones tradicionales, tal y como los hemos conocido desde los años 50, tengan una segunda oportunidad lejos de las capitales internacionales y de los medios de comunicación.
Finalmente, los salones tradicionales, tal y como los hemos conocido desde los años 50, tienen una segunda oportunidad lejos de las capitales internacionales y de los medios de comunicación.
Los fabricantes van desistiendo de asistir a los salones tradicionales por razones de costes (un stand en el de París