Tras el escándalo por las emisiones contaminantes de los motores diésel EA189 del Grupo Volkswagen, las autoridades se han puesto las pilas para endurecer la normativa y procedimientos de homologación. Fruto de este trabajo ha nacido el protocolo WLTP (Worldwide harmonized Light vehicles Test Procedures) que parece estar poniendo contra las cuerdas a algunos fabricantes a la hora de homologar las emisiones y consumos de sus coches.
El procedimiento de prueba de vehículos ligeros coordinados a nivel mundial ha obligado a BMW ha cesar la producción del M3 y no comercializar los modelos de gasolina de la Serie 7 en Europa. En el Grupo Volkswagen también ha sembrado el temor, pues ha obligado a Porsche y Audi a revisar la producción de los SQ5 y Cayenne por no ser capaces de superar las pruebas de homologación.
Sin embargo a esta lista se acaba de añadir una nueva firma. En este caso, es la francesa Peugeot quien ha sucumbido ante los encantos del WLTP pues su hot hatch 308 GTi no ha sido capaz de superar la homologación. Según parece, la veterana mecánica 1.6 litros THP de 272 CV contamina más de lo inicialmente previsto, por lo que los responsables de la marca han decidido cesar temporalmente la producción de esta versión.
Para solucionar el problema, los ingenieros de Peugeot estarían analizando la viabilidad para incluir un filtro de partículas en esta mecánica o si no fuera posible, meter el nuevo bloque 1.6 litros de la familia PureTech que ya ha estrenado la última generación del 508. En todo caso, la producción estará parada entre los meses de junio hasta principios de octubre.
Teniendo en cuenta que será en el mes de octubre cuando se reanude la producción del Peugeot 308 GTi podemos estar seguros que la presentación de esta actualización mecánica será llevada a