Desde que el mundo es mundo la imitación ha formado parte de nuestra vida, pues sin ella nunca hubiéramos llegado al momento histórico en qué estamos ahora. Uno de los campos donde más se ha explotado es en el sector del automóvil, pues aunque a lo largo de la historia se han dado modelos que se han parecido entre sí, las firmas chinas se han encargado de realizar auténticas clonaciones.
Dayang Motorcycle es un pequeño fabricante chino de motocicletas que ha saltado a la palestra por calcar una a una las líneas que definían la estética de la tercera generación del mítico Suzuki Jimny. La denominación comercial que ha recibido esta “criatura” es Dayang Chok-G1 y Chok-G2 pues con una estética común se ofertan dos versiones diferentes que mantienen la misma mecánica eléctrica.renderAd(adPage,44162);
La copia china del Suzuki Jimny está animado por una “muy” modesta mecánica eléctrica que rinde una potencia de 6 kW, es decir, poco más que 8 CV de potencia. Está alimentado por una batería que le permite recorrer con una recarga hasta 100 kilómetros a una velocidad máxima de 50 kilómetros por hora. Desconocemos el resto de detalles técnicos, pero bromas aparte, no es un dechado de virtudes.
Respecto al diseño y estética que luce el Dayang Chok-G2 las únicas diferencias que existe respecto al anterior Suzuki Jimny son la ausencia de la rueda de repuesto colgada sobre el portón que da acceso al maletero y el diseño del habitáculo y salpicadero. El resto de elementos es una copia “cuasi” exacta de las formas, volúmenes y líneas que ha lucido uno de los todo terrenos más míticos de cuantos se han vendido.
El precio final de venta al público de este producto en China es de unos 5.600 euros, convirtiéndose en una alternativa muy atractiva para gran parte de la