La llegada del Aston Martin DBS Superleggera ha supuesto para Ferrari conocer a su nuevo gran archienemigo, por lo menos en los que súper GT se refiera. El concepto berlinetta también saben explotarlo en Inglaterra y así el Aston Martin DB11 se ha convertido en Aston Martin DBS Superleggera para plantar cara al Ferrari 812 Superfast. Tal es la ambición de Aston Martin en su afrenta con Ferrari que no se han cortado en hablar sobre el desarrollo del DBS como respuesta al exceso de temperamento que ofrecen los superdeportivos V12 de Ferrari.
El nuevo DBS de Aston Martin redefine la idea de súper GT para así plantar cara a una Ferrari mucho más temperamental
A pesar de que todavía Aston Martin no ha revelado todas sus cartas, aún nos queda por conocer al Aston Martin Vanquish como la visión más radical de su gama V12, la llegada del Aston Martin DBS Superleggera se ha convertido en toda una declaración de intenciones. En Gaydon están en pleno proceso de reinvención y para ello han decidido llevar al DB11 desde su posición más cómoda como GT rival del Bentley Continental GT a un escenario más prestacional donde el enemigo a batir es el Ferrari 812 Superfast. Un mismo punto de partida, pero con resultados bastante diferentes.
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De este modo, tras la presentación internacional del Aston Martin DBS Superleggera, los compañeros de CarThrottle han podido hablar largo y tendido con el ingeniero jefe de Aston Martin Matt Becker. Tras su expriencia en Lotus, el fichaje de Becker estaba claro que traería importantes cambios en el rumbo de Aston Martin y el DBS es su primer gran proyecto en este sentido. Becker no ha dudado en admitir que el desarrollo del DBS Superleggera se realizó con el Ferrari F12