General Motors vendió Opel al grupo PSA en 2017. Opel formó parte del gigante estadounidense durante 88 años, pero en prácticamente las dos últimas décadas GM no fue capaz de devolver Opel a la senda de la rentabilidad (y perdió 20.000 millones de dólares en el intento). Al final, en GM, tiraron la toalla para centrarse en Estados Unidos y China vendiendo Opel a PSA. Y en tan sólo un año, va PSA y consigue que Opel gane dinero. ¿Cómo lo han logrado?
Opel ganó 502 millones de Euros en la primera mitad de 2018 (los primeros beneficios de Opel desde 1999). Opel tiene ahora el mismo margen de beneficio que Volkswagen (la marca, no el grupo), la cual tiene el doble de cuota de mercado y sus ventas a nivel global son cinco veces superiores a las de Opel.
Carlos Tavares, el CEO del grupo PSA, consiguió apaciguar los sindicatos y vio la manera de poder fabricar a menor coste coches asequibles en uno de los países con los costes salariales más altos de Europa.
Al igual que hizo en PSA al tomar las riendas del grupo francés, en Opel buscó primero apaciguar los empleados y los sindicatos al evitar cerrar fábricas nada más llegar. Lo que sí hizo es conseguir un acuerdo con la plantilla para pasar de 40 horas semanales de trabajo a 35 horas y eliminando 3.700 puestos de trabajo mediante incentivos para la baja voluntaria, reconversiones y prejubilaciones.
Tavares también redujo la producción de automóviles. En Russelsheim, por ejemplo, se pasó de 55 coches a la hora a 42 unidades a la hora. Las ventas de Opel han caído un 6,2 % en la primera mitad del año, pero en cambio decidió centrarse en los coches que el público sí compraba. Y es que el objetivo no es ser