El proyecto más importante de la industria automovilística rusa moderna ha visto la luz con motivo del Salón del Automóvil de Moscu. Hablamos del proyecto Kortezh y su primer coche fabricado, el Aurus Senat. De este modo Rusia pone en el mercado un fabricante de coches de lujo que pretende rivalizar con Rolls-Royce, Bentley y Mercedes-Maybach. El Aurus Senat es tan sólo el primer coche fabricado, un expositor rodante que hace las veces de coche oficial del presidente Vladimir Putin, pero que en el futuro próximo pretende convertirse en el coche preferido de los rusos más adinerados.
El diseño exterior e interior del Aurus Senat está claramente influenciado por Rolls-Royce y Mercedes-Benz
El proyecto Kortezh es un ambicioso programa ideado por Putin para reflotar la industria automovilística rusa y colocarla al nivel de los grandes fabricantes del mundo. Lejos de apostar por un concepto de coche generalista capaz de motorizar todo el país, el proyecto Kortezh apostó por el desafío de crear una gama de vehículos de lujo a la altura de los mejores fabricantes de su categoría. Aunque el Aurus Senat se ha presentado en carrocería berlina, el proyecto contempla la fabricación de más variantes, entre ellas un SUV capaz de plantar cara al Bentley Bentayga y al Rolls-Roye Cullinan.
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Aunque todo el proyecto Kortezh ha sido desarrollado en suelo ruso bajo el control e inversiones del Instituto Central de Investigación del Automóvil de Rusia, a lo largo de su programa ha trascendido la colaboración con diferentes fabricantes y estudios extranjeros como Porsche Engineering. Así, el Aurus Senat no puede ocultar su influencia por parte de otros fabricantes como