Un Ferrari 250 GTO muy especial, el número 3.412, se ha convertido en el coche más caro jamás vendido en subasta pública. Así lo afirma la casa de subastas RM Sotheby’s, que ha hecho público hoy el montante de la operación: 48.405.000 dólares (41.612.000 euros, al cambio), una cifra que queda en la parte baja de las expectativas anunciadas a finales de julio.
Según explica RM Sotheby’s, no es frecuente que un Ferrari 250 GTO como este se venda en subasta pública, ya que estos coches tan especiales se suelen transmitir de forma privada. De hecho, los precios pueden ser mucho más elevados que en el caso de este 250 GTO, pero no se les da publicidad.
¿Qué tiene de especial este Ferrari 250 GTO?
El número 3.412 fue el tercer Ferrari 250 GTO de un total de 36 unidades producidas, y el primero en contar con una carrocería de Serie I, con una entrada de aire más pequeña para el radiador, conductos de ventilación de frenos más estrechos, cierres del capó y también tomas de aire laterales.
Salió de Maranello en abril de 1962, y fue uno de los cuatro GTO que mejoró el carrocero Scaglietti. Este dotó de mayor agresividad al GTO y le añadió detalles como un alerón trasero o luces intermitentes bajo los faros principales. La piel del 3.412 se presenta en color rosso cina y su interior alberga asientos tapizados en tela de color azul.
En la parte mecánica, cuenta con un motor V12 tipo 168/62 competizione y, aunque la caja de cambios y el eje trasero son los originales de fábrica, el motor de serie fue guardado y convenientemente conservado, y ahora acompaña al coche, aunque no montado. El 3.412 equipa hoy un motor de 250 GT con especificaciones GTO, lo que le permite