Hace muchos años en Diariomotor se nos ocurrió recrear el aspecto que tendría un Audi A8 fabricado por SEAT. Llegamos a bautizar como SEAT Cuenca a aquél engendro del badge-engineering, una idea que plasmamos como inocentada en portada. Algunos medios extranjeros se tragaron la broma “con patatas”. No en balde, en aquella época SEAT acababa de lanzar el Exeo, un Audi A4 B7 con el logotipo de SEAT en su calandra. La idea de esta recreación, recogida por Carscoops y creada por el aficionado español Borja Pérez Loren es similar. ¿Qué aspecto tendría un hipotético “Audi R8” fabricado por SEAT?
Pues un aspecto que nos encanta, para qué negarlo. Nos gusta tanto que nos apena que nunca vaya a ser lanzado un coche así bajo el paraguas de SEAT. De hecho, el Audi R8 de segunda generación no ha tenido ventas boyantes. Pese a ser un fantástico y equilibrado superdeportivo, por un precio en el entorno de los 200.000 euros muchos clientes prefieren una marca más exótica como Ferrari o Lamborghini -lo cual es parodójico si tenemos en cuenta que el Huracán y el R8 son esencialmente el mismo coche. No obstante, soñemos durante un par de párrafos e imaginemos que un coche así existiera.
El propio futuro del Audi R8 está en entredicho a causa de ventas modestas y el foco de Audi en modelos de gran volumen y mecánica electrificada.
Imaginad que estamos en 2022 y Audi ha dejado de vender el R8 tras dar el salto a una gama completamente eléctrica. El desarrollo del R8 está amortizado y decide entregarle a SEAT la potestad de su destino. SEAT lo equipa con el ya vetusto 2.9 V6 biturbo del Grupo Volkswagen y lanza un “R8 lite” con 400 CV de potencia y un precio ajustado a 99.000 euros. Su