— Por favor, póngame 10 galones de gasolina, límpieme el parabrisas, revíseme el aceite y… ah, sí, mónteme unos cinturones de seguridad para este coche, que voy a tomarme una tarta de arándanos y un café.
Puede sonar extraño, pero algo así debió de suceder en montones de gasolineras de Estados Unidos allá por 1967, cuando la petrolera Chevron decidió fidelizar a su clientela de un modo sencillo pero efectivo: evitando que se mataran con el coche cuando en Estados Unidos no era obligatorio que los automóviles montaran de serie cinturones de seguridad.
Hoy puede obtener este cinturón de seguridad por 5,95 dólares en la mayoría de gasolineras Chrevron, con instalación gratuita.
¿Por qué? Simplemente porque Chevron cree que los cinturones de seguridad van con su coche, y con todos los coches.
¿Es un buen trato? Sí, lo es. Muchos han pagado 12,95 dólares por este mismo cinturón, más su instalación.
Chevron no obtiene beneficios con estos cinturones. Queremos que los monte porque sabemos que salvan vidas. 5.000 al año, según el Consejo Nacional de Seguridad. Una de ellas puede ser la suya. Esto da para pensar. El Consejo estima que su probabilidad de daños severos se recorta en un 33 % con un cinturón de seguridad.
Estos cinturones que le ofrece su distribuidor Chevron van más allá de los requisitos de seguridad del Gobierno de Estados Unidos. Los fabrica Davis Aircraft en un resistente nylon Caprolan al 100 %. Incorporan hebillas de duro aluminio de aviación, cómodas y de apertura rápida, y se ajustan a cada coche.
Los cinturones de seguridad salvan