Volkswagen es el primer fabricante automovilístico en usar la última tecnología de impresión 3D. La mayor ventaja es que la productividad es hasta 50 veces mejor que con otros métodos de impresión 3D, dependiendo del componente. Con ello, por primera vez la impresión tridimensional está lista para la producción en masa en la industria automovilística. Junto con el fabricante de impresoras HP y el fabricante de componentes GKN Powder Metallurgy, Volkswagen está impulsando el desarrollo de la tecnología para la producción en masa.
Un vehículo Volkswagen se fabrica a partir de entre 6.000 y 8.000 piezas distintas. Sin embargo, los antiguos procesos de impresión 3D solo se pueden usar para la producción especial de piezas individuales o prototipos. La tecnología de aditivos 3D Metal Jet de HP permite por primera vez la producción de un gran número de piezas usando la impresión 3D, sin tener que desarrollar y fabricar las herramientas correspondientes. Esto reduce significativamente el tiempo requerido para producir las piezas. Como resultado, ahora el proceso también es interesante para la producción de grandes cuantidades en un período corto de tiempo.
En colaboración con HP y GKN, Volkswagen está desarrollando la tecnología para que algunos elementos de diseño puedan ser impresos en pequeñas series, como primer paso. Este será el requisito: poder producir partes de diseño individualizadas como inscripciones en el portón trasero, pomos del cambio de marchas especiales o llaves con inscripciones personalizadas para clientes sin que ello suponga una gran labor o un gran esfuerzo. El plan es poder ofrecer este tipo de individualización a los clientes lo antes posible.
Producción en serie a la vuelta de la esquina
El año que viene, GKN Powder Metallurgy tiene la intención de establecer una cadena de procesos orientada a la producción automovilística en colaboración con Volkswagen. Los primeros componentes (de diseño) pequeños se