Si quieres quitar las pegatinas de tu coche, existen formas de conseguirlo sin dejar ningún rastro y sin causar daños. No serás ni el primero ni el último que tenga problemas con los adhesivos, ya sea sobre cristal o sobre la pintura.
En el caso de las ventanas, el problema suele ser más bien el deshacerse de los dichosos restos. Un problema que ocurre con cierta frecuencia debido a las pegatinas de la ITV o a los adhesivos medioambientales. En el caso de la chapa, se añade la dificultad de no dañar la pintura del coche, ya que ésta se puede rayar incluso con la uña.renderAd(adPage,44162);
Pegatinas en la pintura
El objetivo en este caso es quitar el adhesivo sin causar ningún daño en la pintura o el esmalte que la recubre. Un proceso que puede complicarse mucho si la pegatina lleva varios años adherida.
Lo primero es la limpieza
Antes de quitar la pegatina, conviene lavar la zona con agua y jabón para quitar las partículas que puedan rayar la pintura cuando quitemos los restos de pegamento. Un remojón con las pistolas de agua a presión valdría también.
Aviso: Si la pegatina es de papel no la mojes, porque eso dificultará extraerla entera más tarde. En lugar del agua, usa un paño para sacudir el polvo.
Calienta las pegatinas
Para evitar problemas al desprender las pegatinas, lo mejor que se puede hacer es calentar su pegamento. Puede bastar con colocar el coche al sol en verano, pero si eso no es posible o no es suficiente, utiliza un secador de pelo. Normalmente uno inalámbrico no tendrá suficiente poder calórico, así que es recomendable que acerques el coche a un enchufe en el garaje o utilices un alargador.
Coloca el secador a unos 5 cm de la pegatina y cerca del borde que vayas a empezar a despegar. Hazlo