El anuncio de la “muerte” de los coches con motor de combustión interna, que dejarían de venderse en 2040, y de circular en 2050, para algunos fue entendido como un toque de atención, ya no solo para los coches diésel y gasolina tradicionales, sino también para el coche híbrido. El pasado fin de semana ya analizábamos por qué los coches híbridos no estaban muertos y por qué son la alternativa ideal, al diésel, y a los coches tradicionales. El último gesto del Gobierno hacia los coches híbridos llegaba de Teresa Ribera, la ministra de Transición Ecológica, que ha reconocido que ella compraría un coche híbrido.
El coche híbrido tiene futuro, pero el eléctrico es el futuro
¿Y por qué un coche híbrido? En una entrevista a la que acudía en Televisión Española – ver entrevista íntegra en la web de RTVE – Teresa Ribera, y ante la pregunta de qué coche compraría, si tuviera que comprárselo mañana mismo, aseguraba que sería un coche híbrido.
La ministra defendía que a día de hoy no se puede “trasponer” el escenario que se espera en 2040. La razón por la cual compraría un coche híbrido es que no dispone de un enchufe en el garaje. Recordemos que, a falta de la presentación oficial del borrador de Ley de Cambio Climático y Transición Energética, todo apunta a que las ayudas a la renovación del parque de automóviles podrían centrarse únicamente en coches que prescindan de motor de combustión interna y, por lo tanto, no sufraguen ayudas a los coches híbridos.
Para adquirir un coche eléctrico o híbrido enchufable a día de hoy es necesario contar con un enchufe en el garaje, si bien es cierto la ley facilita que puedas instalar un punto de recarga en el garaje, incluso en garajes comunitarios
En este vídeo reflexionábamos acerca de los