Cuando un petrolhead muere, posiblemente el paraíso con el que sueña es esto. Se trata de una de las mejores colecciones privadas de Porsche de todo el mundo, hasta ahora prácticamente desconocida. Se llama simplemente “The White Collection”, y en ella encontramos casi sesenta vehículos de la marca, con un mismo denominador común: su color. Un color blanco, en muchas tonalidades diferentes, pero blanco al fin y al cabo. Incluso el mobiliario, las paredes o el color del suelo es del mismo color. Si nos acompañas, la podrás conocer un poco más. Prepara el babero.
La colección está en Estados Unidos, en una localización no comunicada públicamente. Carl Bauer es el comisario de esta apasionante colección, la persona que los ha seleccionado y ordenado, además de mantenerlos en perfecto orden de funcionamiento. Es posiblemente uno de los mejores trabajos del mundo. En la colección no falta ninguno de los greatest hits de la marca: cuentan con la primera de las 337 unidades del Porsche 959 Komfort fabricadas, un Porsche 918 Spyder y auténticas rarezas como un Porsche 911 Carrera RSR (993) de calle, un coche valorado en varios millones de dólares.
Es la mejor colección de Porsche del planeta… a excepción de la contenida en el museo e instalaciones de la marca en Zuffenhausen.
De hecho, sólo 51 unidades fueron fabricadas, y una de ellas se subastó recientemente por 2.016.000 euros. La colección está organizada con mucho gusto. Los coches más especiales de la marca cuentan con un protagonismo único, y el resto se agrupan por familias: los Speedster por un lado, los Porsche 356 por otro lado, los transaxle tienen su propia zona. Los Rennsport por un lado, los GT3 por otro, los Turbo… es una maldita maravilla. Es un verdadero paraíso para los amantes de la marca y en