Comienza el GP de Brasil de F1 2018, con unos libres donde no ha habido demasiado que destacar. La pista estaba bastante sucia, se veía claramente en pantalla cuando los coches pasaban por las rectas y levantaban gran cantidad de polvo, eso ha hecho que muchos coches bloqueasen en curvas o no tuviesen un buen agarre desde el principio, aunque no será un gran problema ya que irá mejorando poco a poco. También hemos visto salidas de pista por lo mismo que estamos comentando…
En el circuito ha habido algunas remodelaciones, con unas zanjas en el asfalto para mejorar el agarre y la evacuación de agua en caso de que llueva. Veremos si es suficiente, ya que en Brasil llueve bastante historicamente y es una pista donde, apesar de las pendientes, no desaloja demasiado bien el agua, lo que es un grave problema y hemos tenido sesiones detenidas por culpa de la lluvia. Por cierto, hoy había algunas probabilidades, pero finalmente han pasado ambas sesiones de entrenamientos libres en seco y no ha hecho acto de presencia, aunque las previsiones podrían dar lluvia para el domingo en carrera, lo que sería especialmente emocionante. renderAd(adPage,44162);
Una de las consecuencias más graves de estos problemas con la pista ha sido el que hemos visto con Nico Hülkenberg en la segunda sesión de libres, que ha entrado demasiado fuerte y ha perdido el control del coche impactando contra las barreras y dañando su Renault, lo que lo ha dejado fuera de pista durante la sesión de libres 2, posando todo el trabajo del equipo sobre el Renault de Carlos Sainz, que ha estado solo probando todo lo que tenían en el programa de pruebas para esta sesión, lo que no es bueno para el equipo y tendrán menos datos, incluso no han podido usar ambos