Las últimas semanas han sido muy ajetreadas, tras la polémica desatada por la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, en la que el Gobierno español pretendería introducir dos fechas clave. La primera, 2040, fecha a partir de la cual no se vendería en España ningún coche con motor de combustión interna. La segunda, 2050, fecha a partir de la cual quedaría prohibida la circulación a cualquier coche de combustión interna, incluidos diésel, gasolina, gas, e incluso híbridos. La Unión Europea parece estar de acuerdo con estas fechas y, de hecho, presentará una estrategia que plantea prescindir por completo de los combustibles fósiles, y por ende, de los motores de combustión interna, en 2050.
La prohibición de los coches de combustión interna, diésel y gasolina, en 2050
El País asegura que, según el documento al que han tenido acceso, este plan se presentará hoy mismo.
El documento refleja que, según la estrategia actual, la reducción de emisiones que alcanzará el transporte por carretera llegará únicamente al 60% en 2050. Una cifra a todas luces insuficiente para cumplir con los compromisos en materia de descarbonización, y reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, que han adquirido la Unión Europea y sus miembros con acuerdos como los alcanzados en las cumbres de París.
La Unión Europea también prohibirá los coches de combustión interna, diésel y gasolina, en 2050
Una nueva hoja de ruta para los coches de combustión interna
Este plan, sin duda, es mucho más ambicioso de lo que se había planificado inicialmente.
Estos días os hablábamos precisamente de las intenciones de Europa con respecto al fin de los coches de combustión interna. El compromiso anterior hablaba de una reducción de los gases de efecto invernadero para 2050 entre el 80% y el 95%. El objetivo, ahora, es que la descarbonización en 2050 sea total.
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