El que fuera directivo de Nissan, Carlos Ghosn, ha aceptado dimitir como CEO de Renault, que mañana reunirá a su consejo de administración para sustituirlo y designar a un nuevo directivo. La decisión del exdirectivo de retirarse voluntariamente ahorrará a Renault el mal trago de revocarle, después de resistirse a apartarle del cargo sin pruebas sólidas que confirmen su supuesta mala conducta financiera.
En cuanto a los nombres que suenan para sustituir a Ghosn, el ministro francés de Economía y Finanzas, Bruno Le Maire, dejó caer en una entrevista que el número uno de Michelín, Jean-Dominique Senard, «sería un excelente presidente de Renault».
Ghosn, en prisión y a la espera de un juicio que podría tardar seis meses
Puede que mañana sepamos si Thierry Bolloré, que desde la detención de Ghosn en Tokio en noviembre ejerce como director general delegado provisional, asume a partir de ahora el cargo de consejero delegado del grupo del rombo.
Thierry Bolloré.
Así, Ghosn ha aceptado renunciar a su puesto en Renault después de que el Gobierno francés -el mayor accionista de la empresa- pidiera un cambio de liderazgo.
Recordemos que la fiscalía de Tokio le ha acusado de ocultar compensaciones millonarias pactadas con Nissan y de violar la confianza de la empresa por utilizar fondos del fabricante para cubrir pérdidas personales en los mercados financieros.
En Motorpasión
Japón desterró el coche diésel cuando en Europa lo ensalzamos. Y ahora lo recuperan cuando aquí lo queremos matar
Mientras tanto, Ghosn acumula 66 días en prisión mientras Tokio espera una confesión