Después de haber sido desalojados del Paseo de la Castellana de Madrid, donde se encontraban concentrados, los taxistas se han dirigido hacia el número 13 de la calle Génova, donde tiene su sede el Partido Popular. ¿El motivo? Protestar por lo que consideran un apoyo decidido del Gobierno de la Comunidad de Madrid hacia los VTC.
«¡Queremos lo de Barcelona y lo queremos ya!», ha sido uno de los gritos que se han escuchado frente a la sede del Partido Popular, en alusión al acuerdo alcanzado por taxistas y administración en Cataluña, un acuerdo que establece, a la práctica, que los servicios VTC deban contratarse con una antelación de una hora, para diferenciarse claramente del servicio inmediato que proporciona el taxi. Con todo, cabe recordar que en la votación realizada por los taxistas en la Ciudad Condal, el resultado fue muy ajustado.
Así se encuentra en estos momentos la calle Génova. pic.twitter.com/TYfHvtqLeH— gacetadeltaxi.com (@gacetadeltaxi) 28 de enero de 2019
De votar al PP a romper el carné
Una de las imágenes singulares que ha dejado la protesta nos muestra a un taxista que rompe con el Partido Popular y con su carné de afiliado. Contrasta su gesto con el hecho de que ha sido Podemos quien más ha capitalizado la posición de los taxistas durante los últimos tiempos.
Este taxista me decía el otro día: «Los taxistas, de toda la vida, hemos votado al PP». Hoy ha venido a Génova a romper su carné de afiliado. pic.twitter.com/WkuXYTZ4yp— Juan Vargas (@JVargas101) 28 de enero de 2019
La cuestión no es menor, y se enmarca en la fuerte politización que rodea la guerra del taxi. Mientras el presidente del PP, Pablo Casado, proponía esta mañana liberalizar el sector, planaba el