El advenimiento de sistemas de infotainment de última generación abre un mundo de posibilidades de cara a la conectividad de los coches, pero también a funciones que nunca antes habíamos asociado a un coche, como jugar a videojuegos – sin contar aquellos proyectos tuning “de antaño” que incluían consolas conectadas a una pantalla en la consola central. En el pasado Mobile World Congress de Barcelona, había un Mercedes CLA expuesto en el stand de la marca alemana. Un Mercedes CLA en el que podíamos jugar al Mario Kart, cómodamente sentados en el asiento del conductor.
La experiencia de juego era realmente inmersiva. En la pantalla central del sistema de infotainment MBUX – como ya sabéis está compuesto por dos pantallas de 12 pulgadas – se ha cargado el videojuego. Se trata de la versión de código abierto de Mario Kart, llamado SuperTuxTart. Además de instalar el juego en el sistema MBUX, Mercedes permite jugarlo como si estuviéramos conduciendo el coche. El acelerador y el freno, así como el giro del volante, se traducen en movimientos de nuestro kart en el juego. Incluso las levas tras el volante activan ciertas funciones del juego.
También se puede jugar a videojuegos precargados en el sistema de infotainment del Tesla Model 3.
Por ejemplo, el lanzamiento de las “armas” que vamos recogiendo con nuestro coche virtual. Por si esto fuera poco, la ventilación del coche y el sistema de iluminación del habitáculo también contribuyen a sumergirnos aún más en la experiencia de juego: cuanto más rápido vamos en el juego, más fuerte soplan los ventiladores. Cuando tenemos un accidente, además de luces y destellos, nuestro cinturón de seguridad se tensa ligeramente. Una experiencia apasionante desde el punto de vista de cualquier aficionado a los coches y a los videojuegos, gracias al uso de la “realidad