Aston Martin ha decidido acudir al Salón del Automóvil de Shanghai con un juguete eléctrico. China es uno de sus mercados principales y, sabiendo la gran acogida que tienen este tipo de vehículos, quiere agradar a sus clientes. Por ello, a pesar de que ya conocíamos algunos de sus detalles técnicos, han decidido presentar oficialmente el nuevo Aston Martin Rapide E.
La forma para crearlo ha sido sencilla: han cogido el Rapide “normal” y le han quitado el bloque gasolina 6.0 litros V12. En su lugar han puesto un paquete de baterías de 800 voltios envueltas en Kevlar y fibra de carbono. Cuenta con más de 5.600 celdas de ion litio y alimenta a dos motores eléctricos. Éstos han sido situados en la zona trasera del coche y envían sus 610 CV y 1.000 Nm de par máximo a las ruedas traseras.
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El Rapide E modifica aerodinámica y añade cockpit digital
Sin embargo, aunque para desarrollar el Aston Martin Rapide E los ingenieros de la marca no se han quebrado la cabeza, sí han introducido cambios. En el exterior, los bajos han sido rediseñados para mejorar el flujo de aire. El difusor trasero cambia sus líneas para mejorar la eficiencia. La toma de aire frontal es más sencilla, pues las necesidades de refrigeración han disminuido. Completan estos cambios unas llantas de aleación de nuevo diseño.
Si pasamos al interior, el Rapide E estrena un cuadro de instrumentos digital configurable. Gracias a una pantalla de 10 pulgadas muestra en tiempo real la información relativa al tren motriz. El resto de elementos del salpicadero se mantienen, aunque la calidad de los materiales se ha visto revisada. Con todo, y a pesar de los cambios introducidos, no puede negar que frente sus rivales está entrado en años.
Aún así, Aston Martin ha decidido apostar por el Rapide E