La situación de Smart en los últimos meses está siendo muy compleja. Desde su nacimiento ha contado con un posicionamiento en el mercado un tanto peculiar. Los ForTwo y ForFour han creado escuela en Europa, pero en otras regiones del mundo no lo han tenido tan fácil. Las razones para ello han sido variadas, pero en mercados como Estados Unidos y Canadá son obvias: tienen un tamaño ridículo para lo que demanda el mercado.
A esta situación, hay que añadir dos condicionantes extra. El primero, que su matriz, Daimler AG, decidió que su futuro estaría encomendado a la fabricación de modelos cien por cien eléctricos. El segundo, que sus costes estructurales eran demasiado altos y por ello, han tenido que vender un 50 por ciento de su accionariado a Geely. Tras ello, y con dinero contante y sonante, comenzarán una nueva andadura, aunque no lo veremos hasta 2022.
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Smart ha ido perdiendo cuota de mercado en los últimos años
El caso, es que Smart ha tenido que tomar una drástica decisión en Estados Unidos y Canadá. A día de hoy, el único producto que comercializan es el EQ ForTwo. Durante los primeros años de vida el público americano lo valoró pero con la “aparente” recuperación económica que está viviendo la región, se han olvidado de él. Además, no podemos olvidar un detalle y es que sólo está disponible con motor eléctrico, condicionando su uso drásticamente.
Por ello, y tras varios años de caídas en su cuota de mercado, el Smart EQ ForTwo abandonará ambos mercados. Según un portavoz de Daimler AG en América del Norte
“Después de una cuidadosa consideración, Smart dejará de fabricar su modelo EQ ForTwo con batería eléctrica en los mercados de EE.UU. y Canadá al concluir 2019. Varios factores, incluido un mercado de micro coches en declive en EE.UU. y Canadá,