Hace unos meses, el Grupo PSA y Toyota Motor Company anunciaron cambios en su acuerdo de colaboración. El más llamativo era que el desarrollo de los micro urbanos Aygo, C1 y 108 tomaría caminos diferentes. Sin embargo, antes de que los rumores dieran por zanjada su alianza, confirmaron que trabajarían en otras áreas del mercado. Por ello, surge el nuevo Toyota PROACE CITY, la versión nipona de los comerciales galos.
Este modelo llega al mercado, como el PROACE “original” para completar la oferta industrial de Toyota en el mercado europeo. De esta forma, la firma asiática puede comercializar un producto competente sin necesidad de hacer una fuerte inversión en su desarrollo. Para el Grupo PSA también son ventajas, pues se incrementa su volumen de producción y por tanto, recuperan antes la inversión.
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El Toyota PROACE CITY luce igual que sus hermanas
Al igual que ocurre con los Citroën Berlingo, Opel Combo Life y Peugeot Rifter el diseño del PROACE CITY se mantiene. Es decir, para maximizar los costes y poder ajustar al máximo el precio, los diseñadores de Toyota se han limitado a introducir cambios de matiz. Entre los más destacados están el cambio de parrilla, que ahora es más fina e incluye el logo de Toyota en el centro. Los paragolpes también son diferentes y los faros anti niebla.
En la vista lateral todo se mantiene, a excepción de un detalle. El Berlingo ha apostado por mantener los AirBump de la saga C4 Cactus, pero como el Rifter y Combo Life, el PROACE CITY prescinde de ellos. En su lugar, hay unas protecciones clásicas y un pequeño detalle. El modelo Toyota, según la versión, incluye una pequeña banda cromada que aporta un toque de distinción.
En la zaga tampoco hay cambios significativos, luciendo la misma disposición de grupos ópticos. El paragolpes, como el anterior,