El Mercedes-Benz Clase X, el pick-up de la marca de la estrella, podría estar cerca de su jubilación anticipada, tan sólo tres años después de su lanzamiento. Daimler está buscando la manera de reducir sus costes operativos al haber revisado a la baja su predicción de beneficios. Y uno de los modelos que menos rentabilidad le daría a Mercedes-Benz es el pick-up de la Clase X.
La marca alemana quería ofrecer una gama más amplia a su división de vehículos industriales aprovechando el crecimiento del segmento de los pick-ups ligeros. Sin embargo, tan sólo 16.700 unidades del Clase X se vendieron en 2018 en Europa, Australia y Sudáfrica. Mercedes no lo vende en Estados Unidos, donde el público prefiere los pick-ups “full size”.
La principal razón de sus resultados decepcionantes para la marca está en el precio del coche. Es en todos los países bastante más caro que el Ford Ranger y el Volkswagen Amarok, enre otros pick-ups a los que se tiene que enfrentar en el mercado. Además, las llamadas a revisión no habrían ayudad al modelo (una de ellas era la de una luz en el hueco del pedalier que se soltaba y podía bloquear el pedal de freno).
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