Si por algo son conocidas las marcas de hyperdeportivos es por su claro afán de convertir a sus creaciones en las más rápidas del mundo. Desde que Bugatti resurgió de entre sus cenizas con el Veyron no ha descansado hasta conseguir obtener el título de vehículo de producción más rápido. Sin embargo, marcas como Koenigsegg o Pagani decidieron complicarle el récord a la casa francesa, quien ha vuelto a dar un golpe sobre la mesa al conseguir alcanzar los 490.484 km/h, una velocidad que catapulta tanto a Bugatti como al Chiron hasta lo más alto del sector automovilístico.
Poco a poco los superdeportivos están demostrando proezas inimaginables hasta hace unos años, en los que considerábamos imposible que un coche pudiese rozar los 500 km/h. Pues Bugatti lo ha hecho realidad gracias a este prototipo derivado del Chiron y muy cercano a la fase de producción, motivo por el que podemos considerar que muy pronto esta capacidad estará disponible en la variante de calle.
Ha sido en Alemania donde se ha llevado a cabo este récord, provocando que la firma francesa se posicione por encima de sus principales competidores. Recordemos que hasta la fecha el Bugatti Chiron declaraba una velocidad máxima de 420 km/h y la capacidad de alcanzar los 100 km/h en unos impresionantes 2,5 segundos, pero la marca ha decidido ir todavía más lejos.
De momento no se han hecho declaraciones acerca de las mejoras tanto mecánicas como aerodinámicas que ha padecido este prototipo. Sin embargo, nos percatamos a simple vista de la presencia de una carrocería más larga y ancha, dos requisitos indispensables para poder casi alcanzar los 500 km/h. En cuanto al apartado mecánico podemos esperar que se haya respetado al propulsor W16 de 8.0 litros.
Dicho corazón se encuentra en la tesitura de desarrollar 1.500 CV y 1.600 Nm de par, pero no sería de extrañar que los ingenieros franceses hayan mejorado dichas cifras. Esto nos lleva a considerar que este prototipo no solo haya sido desarrollado para alcanzar dicha velocidad, sino también para anticipar la inminente llegada de un Bugatti Chiron Super Sport como ocurrió en antaño.
Sea como fuere, Bugatti tan solo ha hablado acerca de el límite que acaban de superar, ampliando el terreno para el sector automovilístico. Al mismo tiempo, marcas como Koenigsegg o Pagani habrán empezado a limar sus cuchillos con el objetivo de enviar una respuesta directa a la casa francesa, quien de momento ostenta el título de vehículo más rápido del mundo, pero la guerra aún no ha terminado.