Llegó el nuevo año 2020 y con él ya tenemos aquí la primera competición automovilística del año, el rally Dakar. Envuelto en mucha polémica, la carrera ha cambiado su sede y ahora se disputará en Arabia Saudí, lo que ha afectado directamente no solo a su recorrido sino también a los horarios de las etapas.
La competición se presenta con bastantes alternativas, y un duelo de fondo entre Mini y Toyota por ser los primeros campeones en suelo árabe. Aunque en principio los japoneses parten con algo de ventaja, nadie sabe qué esperar de este Dakar en el que cambia prácticamente todo, volviendo un poco al espíritu africano.
Al Attiyah es el favorito y Fernando Alonso, la atracción
El gran favorito es Nasser Al-Attiyah. No solo por ser el campeón de 2019 sino porque además se conoce la zona como la palma de su mano. Parece el piloto más equilibrado en la relación entre velocidad y navegación, y además no cuenta con demasiada competencia interna dentro de Toyota, al menos a priori.
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Porque es cierto que uno de sus compañeros es el campeón de 2009, Giniel de Villiers, pero también es verdad que el sudafricano ya ha perdido un poco de punch y lleva unas ediciones que le cuesta un poco más estar en la batalla. También correrá con Toyota el holandés Bernhard Ten Brinke, en principio un piloto de talla inferior a los otros dos.
Por parte de Mini hay dos grandes bazas.