SF1000, ese es el nombre que ha elegido la Scuderia Ferrari como sucesor del SF90. El Teatro Romolo Valli en Reggio Emilia iba a ser testigo (con Marc Gené y Silvia Hoffer como maestros de ceremonia) de la primera presentación del Mundial de Fórmula 1 con todas las de la ley, después de que HAAS y Mercedes-AMG se hayan apresurado a mostrar únicamente las libreas que emplearán en 2020. Los italianos quieren volver a ser grandes y no solo historia, por lo que, ante la última temporada de la actual reglamentación, se ha propuesto a trabajar arduamente en silencio para tratar de recuperar esa competitividad perdida en 2019.
Quizás la principal novedad en el esquema cromático elegido por la marca es precisamente que no se le ha dado tanto protagonismo al regreso de la tricolore a la librea tal y como se elucubraba por el lugar en el que se ha producido la presenteación. No se recurre a la bandera italiana desde 2018, después de que la pasada temporada se utilizara un tono de rojo más mate y alejado al tradicional rojo Ferrari, así como un claro protagonismo del logotipo de «Mission Winnow».
Esto se ha mantenido, aunque la iniciativa/empresa de Philip Morris International comparte lugares destacados en los colores de 2020 junto al #essereFerrari, el que ha pasado a ser el gran eslogan de la estructura. Se mantiene el tono mate y se recupera por el momento esa característica imagen de los cuernos sobre el snorkel que lucieron los monoplazas de la Scuderia a principios de siglo XXI.
El nombre, SF1000 no deja de ser todo un homenaje a su historia del Mundial de Fórmula 1 y a la celebración del millar de Grandes Premios para la Scuderia.
En cuanto a la alineación, sin cambios. Sebastian Vettel y Charles Leclerc seguirán con la